El Urbanismo en Marbella busca reducir el plazo para las licencias de obra y sacar a concurso el PGOU en 2019

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La concejal de Urbanismo, Francisca Caracuel, quiere reducir los plazos de concesio?n de licencias de obra. C.L

La parte técnica de la delegación municipal está pilotada actualmente por el arquitecto José María Morente

Hemos hablado con la edil de Urbanismo del Ayuntamiento de Marbella, Francisca Caracuel, para conocer los principales problemas y desafíos del Urbanismo en el municipio.

Una de las pocas obras en marcha en el casco urbano es ésta de la calle Notario Oliver. C.L.

El Urbanismo de Marbella ha sufrido una nefasta gestión municipal desde hace décadas. Los gobiernos del GIL lo usaron como método para enriquecerse clasificando, recalificando y haciendo todo tipo de tropelías urbanísticas. Durante las dos legislaturas del PP de Ángeles Muñoz se trató de poner orden al caos, redactando un PGOU, el de 2010, y el tiro salió por la culata, ya que fue anulado en noviembre de 2015 y mandó al municipio de nuevo a los años 80 urbanísticamente.

El gobierno tripartito de José Bernal se encontró a los pocos meses de acceder al poder que tenía que empezar de cero a planificar el futuro urbanístico de la ciudad. Ya fuera por prudencia, por ignorancia o por la inevitabilidad de regir un municipio del siglo XXI con las reglas desfasadas del PGOU del 86, el caso es que Marbella y San Pedro han estado casi paralizados en materia urbanística en los dos últimos años.

Modelo de desarrollo económico del municipio

El modelo de desarrollo económico del municipio está basado en el ladrillo y las inversiones relacionadas con el urbanismo.

Pero cuando se tienen más de 1.000 licencias de obras pendientes de ser aprobadas, y el visto bueno a cada una tarda más de año y medio, y además las licencias de primera ocupación de vivienda también se retrasan a plazos inasumibles, son los demás municipios vecinos como Mijas, Benahavis y Estepona los que se benefician de nuestra nefasta situación urbanística.

Ahora gobierna el bipartito de PP-OSP en el municipio. Y la nueva edil de Urbanismo, Francisca Caracuel, está empeñada en reducir los plazos de la concesión de licencias, reabriendo la Oficina de Atención al Ciudadano y continuando con el proceso para tener un nuevo PGOU en la próxima década. Aunque lo justo es señalar que los socialistas ya habían comenzado a dar los primeros pasos normativos, iniciando la adaptación a la LOUA del Plan del 86, adecuando las Normas Urbanísticas y encargando a un grupo de expertos de la UMA la redacción del pliego de licitación del futuro PGOU.

Planeamiento urbanístico

Respecto al planeamiento urbanístico, la actual edil del ramo, Francisca Caracuel, ha avanzado que “antes de que finalice el mes de junio se espera recibir por parte de la Comisión de Expertos el pliego que nos permita sacar a adjudicación el avance del PGOU” y ha señalado que “se está trabajando en un documento básico con las líneas generales que marcará el desarrollo posterior de un plan general que también va a estar condicionado por la actual Ley de Urbanismo Sostenible de Andalucía (LUSA)”.

La propia Caracuel reconoce, no obstante, que una vez se saque a adjudicación la redacción del PGOU, este puede tardar varios años en estar listo y aprobado.

Mejora con bipartito

De todos modos, Caracuel ha sacado pecho de su gestión, asegurando que en 2017 se ha duplicado la inversión urbanística, de  los 75,2 millones de 2016 a los 158,8 millones invertidos el año pasado.

Además, Caracuel ha asegurado que se han reducido en cuatro meses los plazos en la concesión de licencias. “Queremos reducirlos aún más y que a mitad de 2018 bajen de 18 meses a 10 meses y que el año que viene se concedan en medio año” ha asegurado la edil a este periódico.

José María Morente

Respecto a los retrasos en la tramitación de permisos, “uno de los problemas ha sido que no ha habido un cargo técnico que llevara la batuta en Urbanismo durante el Tripartito”, explica la edil. Por eso, el nuevo hombre fuerte de la delegación es un cargo de confianza clave, el experto arquitecto José María Morente. “Conoce los dos lados del Urbanismo, ya que ha trabajado para Ayuntamientos y la Junta y también desde su prestigioso despacho de Málaga. Tiene el respeto del personal de la concejalía y es quien está detrás de la reorganización de los recursos humanos de la delegación con objeto de hacerla más eficiente y ágil en la tramitación de permisos y expedientes”, asegura Francisca Caracuel. Lo cierto es que promotores, empresarios y vecinos hacen cola ahora en la concejalía para tratar con Morente cualquier asunto relacionado con la delegación.

Difícil herencia

El gobierno del Bipartito ha tenido que recoger la complicada herencia que ya tuvo que asumir en su momento el Tripartito tras sufrir de primera mano el varapalo de la anulación del PGOU del 2010. Por eso, Caracuel, Morente y los cien empleados de la concejalía tienen mucho trabajo por delante para arreglar tantas piezas rotas del motor que mueve la economía de Marbella y San Pedro. Todos vivimos directa e indirectamente de ello. Y la gestión política de los últimos 30 años lo único que ha hecho es deteriorar la marca Marbella más que mejorarla.

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