Marbella contará con medio centenar de nuevos árboles tras la remodelación de la avenida del Trapiche, que se sumarán a los 1.200 ejemplares plantados durante este mandato.
El concejal de Obras y de Parques y Jardines, Diego López, que ha visitado las obras que se están ejecutando en la principal vía de la barriada de Miraflores, ha informado de que ya han comenzado los trabajos para incorporar 15 magnolios grandiflora en la segunda fase del proyecto, “que se unen a las unidades que se sembraron en la primera etapa y a las que se incorporarán en la tercera”.
El edil ha recordado que “estamos dando solución a un problema heredado por la incorrecta elección de especies, que estaban dañando las redes de saneamiento y ponían en riesgo la seguridad para los vecinos ante el riesgo de caída por enfermedad”.
“Los ejemplares anteriores presentaban un desarrollo desorbitado que, en lugares estrechos y cercanos a las viviendas, hacían necesaria una poda continua que provocaba pudriciones que, a su vez, generaban termiteros y, como resultado, los árboles estaban afectados por malformaciones, se volvían inestables y entrañaban riesgo de caídas”, ha apuntado el edil.
Asimismo, ha aludido a la incidencia en la salud de los ciudadanos debidos a la alta polinización, “que provocaba casos de alergias y no los hacían recomendables en entornos de viviendas”.
En su lugar, “se ha optado por una especie de gran porte pero más compatible con el entorno, con un crecimiento más lento y con sistemas radiculares que no afecten a los servicios y las canalizaciones subterráneas”.
Respecto a la remodelación de la avenida del Trapiche, ha afirmado que “supondrá la modernización de la avenida principal de la barriada de Miraflores” y ha indicado que se está ejecutando por tramos “para causar las mínimas molestias a los vecinos”.
“Aunque sabemos que una obra de esta magnitud siempre conlleva alguna incidencia, estamos convencidos de que cuando concluyan los trabajos mejorará la calidad de vida de los ciudadanos”, ha valorado, al tiempo que ha detallado que el proyecto incluye la renovación de las redes de alcantarillado; abastecimiento de agua, sustituyendo la existente de fibrocemento por una de fundición; telecomunicaciones; alumbrado público; instalación eléctrica y riego.
Además, se he llevado a cabo una ampliación del acerado entre las calles Cortijo y Miraflores, “destinando más espacio al peatón ya que eran vías muy estrechas, con árboles muy antiguos que habían causado destrozos y era necesario actuar para adaptar el espacio a los criterios que marca la Agenda 2030”.